Vivir con una enfermedad autoinmune es un desafío al que muchas personas tienen que enfrentarse cada día y, a menudo, estas personas suelen sentirse incomprendidas. Muchas personas no están familiarizadas con lo que significa tener una enfermedad autoinmune y cómo puede afectar a la vida diaria. Los síntomas pueden ser impredecibles y variar día a día, lo que puede dificultar la planificación y el mantenimiento de una rutina. Además, algunas personas pueden experimentar estigma y falta de comprensión de la sociedad.
En este artículo, explicaremos qué es una enfermedad autoinmune, los diferentes tipos que existen y las enfermedades autoinmunes más conocidas.
Qué es una enfermedad autoinmune
En pocas palabras y de forma sencilla podemos decir que una enfermedad autoinmune es un trastorno en el que el sistema inmunológico del cuerpo ataca a sus propios tejidos, órganos y células sanas, al confundirlos con invasores externos. Esto provoca inflamación y daños internos.
Tipos de enfermedades autoinmunes
Hay más de 80 tipos de enfermedades autoinmunes, algunas más conocidas que otras y se pueden dar varias en una misma persona al mismo tiempo. A continuación te dejamos una lista de las más comunes:
- Artritis reumatoide: esta enfermedad causa dolor, inflamación y rigidez en las articulaciones, así como fatiga y fiebre.
- Lupus: esta enfermedad puede afectar a muchos órganos diferentes, incluyendo la piel, los riñones, los pulmones y el corazón. Los síntomas pueden variar ampliamente, desde erupciones cutáneas hasta dolor en las articulaciones y fatiga.
- Enfermedad celíaca: esta enfermedad afecta el sistema digestivo y es causada por una reacción inmunológica al gluten. Los síntomas pueden incluir diarrea, dolor abdominal y pérdida de peso.
- Esclerosis múltiple: esta enfermedad afecta el sistema nervioso y puede causar debilidad muscular, problemas de visión y fatiga.
- Diabetes tipo 1: esta enfermedad es causada por la destrucción de las células beta en el páncreas, lo que resulta en la incapacidad del cuerpo para producir insulina. Los síntomas pueden incluir sed excesiva, micción frecuente y pérdida de peso.
Sin embargo, debes saber que no todas estas enfermedades responden al mismo trastorno inmunológico y que según el problema concreto que presente este sistema interno las enfermedades se desarrollan de una manera u otra. Para que puedas entenderlo mejor a continuación vamos a desarrollar brevemente los conceptos más comunes y a contestar a una de las preguntas más frecuentes en este campo.
Cuál es la diferencia entre enfermedad autoinmune e inmunodeficiencia
- Inmunodeficiencia. Es una condición en la que el sistema inmunológico está debilitado o no funciona correctamente, lo que puede aumentar el riesgo de infecciones. Esta puede ser causada por factores hereditarios o adquiridos, como el VIH / SIDA o el cáncer.
- Enfermedad inmunomediada. Es un tipo de trastorno autoinmune en el que el sistema inmunológico ataca en específico las células y los tejidos específicos del cuerpo que tienen una función inmunológica. Ejemplos de enfermedades inmunomediadas incluyen la tiroiditis de Hashimoto y la enfermedad celíaca.
- Inmunodepresora. Este concepto se refiere a cualquier sustancia o tratamiento que disminuye la función del sistema inmunológico, lo que puede ser necesario en ciertas situaciones, como para prevenir el rechazo de un órgano trasplantado o para tratar ciertos tipos de cáncer.
- Inmunosupresora, por otro lado, es un tipo de tratamiento que se utiliza para reducir la actividad del sistema inmunológico, lo que puede ser necesario para tratar enfermedades autoinmunitarias y prevenir el rechazo de órganos trasplantados. Los medicamentos inmunosupresores, como los corticosteroides y los agentes biológicos, son comúnmente utilizados en este tipo de tratamiento.
Haciendo un pequeño resumen, mientras que la enfermedad autoinmune e inmunodeficiencia son dos tipos opuestos de trastornos del sistema inmunológico, la enfermedad inmunomediada es un subtipo específico de enfermedad autoinmune. Además, las inmunodepresoras y las inmunosupresoras son dos términos relacionados con la regulación de la actividad del sistema inmunológico, pero con diferentes propósitos y efectos.
Por tanto, hablamos de pacientes inmunodeprimidos refiriéndonos a las personas cuyo sistema inmunológico no funciona adecuadamente, lo que los hace más susceptibles a las infecciones y enfermedades. Esta condición puede ser causada por diversas razones, como ciertos medicamentos, enfermedades crónicas, tratamientos de cáncer, infecciones por VIH / SIDA, trasplantes de órganos y terapias de inmunosupresión.
Afortunadamente, hay muchas opciones de tratamiento disponibles para aquellos que viven con una enfermedad autoinmune. Los medicamentos, la terapia física y ocupacional, la terapia cognitivo-conductual y otros tratamientos pueden ayudar a aliviar los síntomas.
Son mortales las enfermedades autoinmunes o se curan
Aunque algunas enfermedades autoinmunes pueden ser reversibles pero la mayoría no tienen una cura definitiva, al tratarse de enfermedades crónicas necesitan de un tratamiento continuo para toda la vida y así poder controlar los síntomas y prevenir complicaciones.
Si te estás preguntando qué tan grave es tener una enfermedad autoinmune, la respuesta no es categórica, sino que la gravedad de una enfermedad autoinmune puede variar ampliamente, dependiendo de la parte del cuerpo que esté siendo atacada y de la severidad de la enfermedad.
Algunas enfermedades autoinmunes, como la tiroiditis de Hashimoto, pueden tener síntomas leves y ser fácilmente controladas con medicamentos. En cambio, otras enfermedades autoinmunes, como el lupus eritematoso sistémico o la esclerosis múltiple, pueden ser más graves y afectar significativamente la calidad de vida de una persona.
Aunque la primera pregunta que nos hacemos es cómo se cura una enfermedad autoinmune, realmente lo que debemos plantearnos es cómo controlarla y llevar una vida lo más normal posible. Ya que el tratamiento de una enfermedad autoinmune se enfoca en controlar los síntomas y minimizar el daño a los órganos y tejidos afectados. Estos tratamientos varían dependiendo de la enfermedad, pero pueden incluir medicamentos inmunosupresores, corticosteroides, modificaciones en la dieta y el estilo de vida, terapias de fisioterapia y apoyo emocional.
Aunque no hay una cura definitiva para las enfermedades autoinmunes, muchas personas con estas afecciones pueden llevar una vida plena y activa si reciben un tratamiento adecuado y siguen las recomendaciones de su médico. Es importante trabajar en estrecha colaboración con un profesional de la salud y seguir todas las recomendaciones y el plan de tratamiento prescrito, para asegurar que la enfermedad se mantenga bajo control y se minimice el daño a los tejidos y órganos.
Si quieres saber qué dicen los mejores médicos sobre este tema aquí te dejamos una entrevista a Ricard Cervera Jefe del Servicio de Enfermedades Autoinmunes de Hospital Clínic de Barcelona y Director de la cátedra UB-GSK
Se heredan las enfermedades autoinmunes
Para contestar esta cuestión debemos tener en cuenta que una enfermedad hereditaria es aquella que se transmite por los progenitores a través del ADN, por lo que todas las enfermedades hereditarias son genéticas, es decir, son consecuencia de la alteración de uno o varios genes y se transmiten de generación en generación.
Una vez aclarado esto podemos decir que, en general, las enfermedades autoinmunes tienen una predisposición genética, lo que significa que existe un mayor riesgo de desarrollar estas afecciones si hay antecedentes familiares de enfermedades autoinmunes. Sin embargo, esto no significa que una persona herede directamente una enfermedad autoinmune de un padre o familiar cercano. En cambio, la predisposición genética puede aumentar la susceptibilidad de una persona a desarrollar una enfermedad autoinmune en respuesta a factores ambientales o desencadenantes.
Factores que pueden desencadenar una enfermedad autoinmune
Algunos factores destacados son:
- Factores genéticos
- Factores hormonales
- Factores ambientales
- Exposición a productos químicos
- Tabaquismo
- Estrés emocional
Estos factores no son únicos y están en investigación ya que aún no se conoce la causa exacta del desarrollo de estas enfermedades. Sin embargo, nunca está de más abandonar malos hábitos como fumar y reducir los ambientes tóxicos para nuestra salud, tanto a nivel físico como emocional.
¿Cómo se vive con una enfermedad autoinmune?
Es importante conocer cómo se siente una persona con una enfermedad autoinmune, para poder ser empáticas y asertivas con estas personas. Entenderlas nos ayuda a ayudarlas y a poder convivir y entender algunas situaciones a las que se puedan enfrentar en el día a día, ser más inclusivos y no juzgarlas por desconocimiento.
Puede que alguna vez hayas tenido un compañero en el trabajo que haya faltado más de lo normal, que haya caído en absentismo laboral. Y tal vez no hayas pensado muy bien de él/ella. Pero es poco probable que hayas pensado que sufre una enfermedad autoinmune.
Existen algunas asociaciones de concienciación para estas enfermedades que comunican datos como que el 50% del absentismo laboral en España tiene el origen en las enfermedades reumáticas.
La vida social no se queda atrás, y es que, algunos problemas también surgen en los momentos que deberían ser para disfrutar como, por ejemplo, las personas con psoriasis que sienten rechazo al mostrar sus lesiones, lo que les provoca vergüenza que deriva en inseguridad en sí mismos. Esto también les dificulta encontrar o mantener una pareja.
Algunas enfermedades generan inflamación y dolor en el cuerpo, esto también dificulta las relaciones con la familia y los amigos ya que repercute directamente en el carácter y el estado emocional de las personas que lo padecen. Estas personas pueden aliviar el dolor, pero no siempre suprimirlo del todo y es muy peligroso tratar de hacerlo, ya que algunos fármacos pueden generar adicción. Encontramos un muy buen reflejo de esto en el famoso personaje del Dr.House en la mítica serie de televisión que lleva su nombre.
Otro problema al que se tienen que enfrentar es a la invisibilidad en los entornos más cercanos, ya que muchos pacientes hacen un esfuerzo tan grande para que sus vidas y las de sus seres queridos no se vean afectadas que a menudo su entorno olvida su situación sobre exigiendo a estas personas enfermas y obviando sin querer sus limitaciones.
Atender una enfermedad autoinmune a tiempo es el escenario ideal para poder llevar una vida lo más normalizada posible, pero no debemos normalizar su malestar, y sí normalizar que una persona tenga ciertas limitaciones no la hace menos válida en su trabajo o en el día a día.
Si estás leyendo esto y tú también tienes una enfermedad autoinmune o tienes a alguien cercano que la padece, deja tu comentario y comparte con nosotros cómo te sientes. ¡Te leemos!
Recomendaciones para el día a día
En Birm estamos absolutamente enfocados en el bienestar de nuestra comunidad. Es por eso que, a continuación, te presentamos algunas recomendaciones que pueden ayudar a las personas con enfermedades autoinmunes a llevar una vida más saludable y feliz. También te recomendamos leer nuestros artículos complementarios a este:
La importancia de los productos naturales para el sistema inmunológico
Cómo reforzar el sistema inmunológico de forma natural
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Para terminar, no queremos que te vayas sin unas recomendaciones básicas para llevar el día a día mejor, por lo que sin más dilación aquí te las dejamos:
1. Escucha a tu cuerpo
Las enfermedades autoinmunes pueden afectar a diferentes partes del cuerpo de diferentes maneras. Es importante prestar atención a cómo te sientes y adaptar tus hábitos diarios en consecuencia. Si te sientes cansado, es posible que necesites descansar más. Si tienes dolor o inflamación en una parte del cuerpo, es posible que debas evitar ciertos movimientos o actividades.
2. Mantén una dieta saludable
Una dieta saludable y equilibrada puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico y mejorar la salud en general. Es importante comer una variedad de alimentos frescos y nutritivos, incluyendo frutas, verduras, proteínas magras y grasas saludables. También es importante limitar la cantidad de alimentos procesados y azúcares refinados que consumes.
En este punto, consulta a tu médico si sería interesante comenzar con una dieta autoinmune. Y ¿Cómo es la dieta autoinmune?
Una dieta autoinmune es un enfoque dietético que se centra en reducir la inflamación y apoyar la salud del sistema inmunológico, especialmente en personas con enfermedades autoinmunitarias.
La dieta autoinmune se basa en la eliminación de ciertos alimentos que se sabe que pueden desencadenar una respuesta inflamatoria en el cuerpo. Los alimentos que se eliminan incluyen granos, legumbres, lácteos, huevos, frutos secos y semillas, alcohol, cafeína y alimentos procesados y refinados.
En su lugar, se enfatiza el consumo de alimentos nutritivos y densos en nutrientes como carnes, pescados, mariscos, verduras, frutas, tubérculos, hierbas y especias. También se recomienda la inclusión de grasas saludables como el aceite de oliva, el aceite de coco, el aguacate y el aceite de pescado.
3. Ejercicio regularmente
El ejercicio regular puede ayudar a mejorar la fuerza muscular, la flexibilidad y el estado de ánimo. Además, puede ayudar a reducir el estrés y la inflamación en el cuerpo. Es importante hablar con tu médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicio y adaptar tu rutina a tus necesidades individuales.
4. Importancia de la medicación y el seguimiento médico
El seguimiento médico regular y el cumplimiento de la medicación prescrita son fundamentales para cualquier persona con una enfermedad autoinmune. Es importante trabajar de manera colaborativa con el médico para garantizar que se estén tomando los medicamentos adecuados y en la dosis correcta, y para realizar las pruebas necesarias para controlar el progreso de la enfermedad. Además, se debe informar al médico sobre cualquier síntoma de que la medicación está teniendo efectos adversos.
Si eres de esas personas que tienen varias dolencias y crees que toman demasiadas pastillas, puedes hablar con tu médico sobre realizar un seguimiento de tratamientos naturales alternativos. De esta manera reducirás los químicos en tu cuerpo, y a la vez tendrás el tratamiento o suplementación que necesitas.
Realizar un seguimiento cuando se cambia de tratamiento es fundamental para saber a tiempo si tu cuerpo tolera bien la medicina natural o comienza presentar una carencia.
En conclusión, es importante mostrar empatía con las personas que viven con una enfermedad autoinmune, al igual que comprender que no son contagiosas y que no siempre tienen un feo desenlace. Adoptar hábitos de vida saludable, comunicar la situación y seguir las recomendaciones de los profesionales son prácticas básicas para llevar una vida lo más feliz posible.
Desde Birm, como profesionales en la materia y pioneros en moduladores inmunológicos naturales, esperamos haber podido ayudarte y aclarar algunas de las preguntas frecuentes en este tema.
Nos vemos en el próximo artículo.